Esta frasecita rec.... la habré pronunciado ya una buena cantidad de veces en mi vida. Pero esta vez viene con aroma diferente.
Huele a recompensa.
Y me gusta.
Me saqué la cresta buscando trabajo, nadie podría imaginar la cantidad de curriculum que he mandado. Y la cantidad de weas que me pasaron en este intento. Mientras buscaba, me puse a trabajar en una peguita, para mantenerme en movimiento (mental más que físico). Hasta que apareció esto; primero el aviso, la postulación, la entrevista y, obviamente mis ilusiones, que por mas que las traté de apaciguar igual se alteraron.
El viernes pasado, como a las 4 de la tarde supe que me había ido bien.
Y me puse a llorar.
En la calle.
Frente a la torre Entel.
Soy una winner!!!!
