jueves, 20 de septiembre de 2007

Mi 18.

Hoy, que todo el mundo retomó sus actividades laborales como gentes responsables que son, yo sigo acá, sin pasaje de regreso y sin ganas de volver.
Este 18 fue bizarro.
Vine a ver a mi familia y los perlas se mandan a cambiar fuera de la ciudad, dejándome más sola que rambo.
Al hombre le bajó el amor (entiéndase: calentura). Me parece francamente admirable la capacidad de hablar weas que adquieren los machos cuando el flujo sanguíneo les "aumenta".
En estas fiestas en que la consigna parece ser "chupar y comer", yo como buena chilena no podía quedar como weona desadaptada social.
.... ¿resultado?
Subí por lo bajo 2 kilos, sumados a los que ya traía adosados, ahora parezco paquete mal amarrado. Estoy al borde de un shock protéico (a mí, que no me gusta la carne) y bueno, del señor hígado ni hablar, porque a ese le perdí el respeto hace años.

2 comentarios:

  1. que mala que te dejaran botada, aunque Rambo se las arreglaba solo igual... jejeje
    Por lo de la subida de peso, TODOS subimos, asi que por ese lado, estamos igual, y todo lo que sube, después baja, es cosa de un par de pedaleos al San Cristobal, y el hígado se regenera.
    Espero que de todas maneras lo hayas pasado "ercelente"...

    Saludos!

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  2. holas!, llegue desde el blog de pedro ;)

    buta, q fome lo de tu familia. de todas maneras me paso un par de veces, asi q me taimaba, me acostaba en la cama de mis viejos a ver el cable y me las ingeniaba con algo sencillo para comer echada jejeje.

    filo, esos 2 kilitos se pierden pronto, total con el verano la pretencion aumenta xD

    ojala haya sido un buen 18, a pesar de lo "alternativo"

    saludos

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